Al largo de los
días son muchas las discusiones sobre los efectos secundarios de algunas
medicinas que contienen un nombre elevado de productos químicos muy fuertes o
también acerca de los beneficios de la medicina natural. En estos tiempos la
medicina convencional ha sido la respuesta para muchísimos de nuestros
problemas de salud, sin embargo, a veces
tomamos más medicamentos de los que deberíamos o hacemos un mal uso de éstos.
En primer lujar al
hablar de medicina natural nos encontramos de que todos éstos tipos de remedios
son mucho menos agresivos. Éste tipo de medicina es orgánica y no sintética y
por lo tanto le es mucho más fácil de metabolizar para el cuerpo. En cambio, la
convencional es fabricada en un laboratorio y al no ser natural el cuerpo no
puede metabolizar todas esas cantidades de productos químicos ingeridos lo que
conlleva a efectos secundarios o substancias que se pueden acumular en nuestro
cuerpo. La medicina natural es muy preventiva. Si eres propenso a tener algún tipo de enfermedad
o quieres prevenirte de alguna, éste tipo de medicina puedes tomarla siempre
antes de que aparezcan los síntomas ya que la medicina natural solo ataca y
protege los lugares donde hay o pueden haber problemas y no a otros puntos del
cuerpo.
Por otro lado la
medicina natural también tiene sus desventajas. Los productos farmacéuticos en teoría
tienen que pasar grandes controles de sanidad, cosa a la cual no se someten los
productos naturales y muchas veces esos remedios pueden no ser lo que prometen.
Otro problema de la medicina natural es su lentitud. Los productos naturales se concentran en el origen
del problema y no en los síntomas como hacen los fármacos. Por eso no obtendrás
ninguna mejora en emergencias o tratamientos que necesariamente tengan que ser
cortos. Eso hace que los síntomas puedan tardar más en desaparecer. Los
remedios naturales no tienen receta y por lo tanto, sus dosis no están controladas
y muchas veces es difícil saber si te estas tomando la cantidad que tu cuerpo
necesita. Otra ventaja que tienen los fármacos es que muchos están cubiertos por
la seguridad social y hace que salgan mucho más económicos que algunos remedios
naturales que no están subvencionados.
Hay medicinas que
te pueden sacar de un apuro y otras que seria mejor no tomar si no es
estrictamente necesario. Igual que hay medicinas alternativas que son
insuficientes y no nos podrán salvar la vida, pero si ayudarnos a prevenir
enfermedades mayores y situaciones de salud críticas. Para mí parecer, no
tenemos que enfrentar la medicina convencional i la natural, sino que se
debería avanzar conjuntamente. Todo lo clínico ha tenido un gran desarrollo,
sobretodo estos últimos años, mientras que los tratamientos naturales pueden
complementarnos y ayudarnos a prescindir de fármacos innecesarios para nuestro
cuerpo. Lo mejor que pueden hacer, es trabajar como uno.
1 comentario:
Buen trabajo, Xenia,pues sólo hay errores de cierta importancia en ortografía. De todas formas, recuerda, NO vayas diciendo: Para mí, según mi modesta opinión, yo pienso...ES EVIDENTE QUE TODO LO QUE DICES ES TU OPINIÓN PUESTO QUE ES UN ARTÍCULO DE OPINIÓN.
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