Antes de la invención de
la escritura del ser humano contaban historia que pasaban de padres a hijos y
de abuelos a nietos. A partir de la invención de la palabra escrita podemos
conocer historias y leyendas de pueblos que nunca antes habíamos visto, la Biblia,
la Ilíada y la Odisea, las mil y una noches son un ejemplo de las historia que
el hombre las conocía antes por la memoria oral.
Desde los primeros años
de la primaria nos enseñan a redactar textos, así la expresión escrita forma
parte de nuestra vida. Lo más importante de la redacción es la manera de expresarse
dentro del texto. Desde un punto de vista objetivo parece fácil, pero en
realidad no lo es, hoy en día estamos acostumbrados que todo nos lo sirvan en
bandeja. Toda la información que recibimos en algún momento fue hablada,
pensada y posteriormente redactada. Internet
nos lo da todo hecho y procesado. Hacer redacciones nos entrena en el arte de
utilizar la puntuación, la imaginación, y el léxico. El redactar nos obliga a
pensar, a hablar de forma escrita y a
cuestionarse por lo que escribimos.
En mi opinión este
ejercicio es muy útil por todas estas razones y porque también nos enseña a hablar y
comunicarnos mejor, de manera correcta y educada.
1 comentario:
Estoy de acuerdo contigo, todo son ventajas y hay muchas. Una de la que, quizá, no somos conscientes es que obligarnos a ser ordenados al escribir acaba haciéndonos más ordenados al pensar, el lenguaje organiza nuestro pensamiento y la elaboración que exige un buen texto escrito mejora también nuestra forma de pensar.
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