19 septiembre 2013

PEQUEÑOS Y GRANDES COMERCIOS

El espíritu comerciante existe desde antes de la aparición de la escritura y por supuesto antes de la invención de la moneda. El trueque, el comercio nos da el toque de humanidad, los animales no comercian. La palabra negocio viene del latín y significa no ocio. Así que los romanos se tomaban muy en serio este trabajo.
 El pequeño comerciante siempre ha formado parte de la sociedad, una casta social, compartida con los artesanos. Era la incipiente burguesía.
Estas pequeñas o medianas organizaciones son el fruto del pensamiento liberal y capitalista, sobre todo hablan de la libertad de las personas de elegir, comprar, asociarse y enriquecerse.
Las frustraciones, los logros, aciertos, pérdidas y esperanzas son parte de la realidad del pequeño comerciante. Sabiendo que el éxito, como decía Winston Churchill, es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse.


El pensamiento contemporáneo, resultado de la revolución francesa, se basa en la Igualdad, la Fraternidad y la Justicia. Todo esto nos autoriza en nuestros días a comerciar, intercambiar y comprar libremente, en un marco legal.
Pensemos en todas las cosas necesarias o innecesarias, como zapatos, ropa, comida, libros, ordenadores, artículos de limpieza,  que tenemos alrededor, son el producto de mucho trabajo, ideas, capital invertido, inventos, que nos llegan en forma de objeto de consumo.
Todo gran comercio  tiene unos comienzos aunque sean insignificantes. Las grandes marcas y multinacionales han comenzado siendo una empresa familiar o una simple asociación de amigos; que poco a poco han ido creciendo y tomando mayor importancia en el mercado.
Las PYMES o pequeñas y medianas empresas son emprendimientos muy admirables, porque implican mucha dedicación, creatividad, ingenio, ahorro, inversión, acompañado a veces de pocas ganancias.
Todos estos productos en un principio han sido hechos por empresas pequeñas, que luego han ido creciendo. Son la base de la economía tal como la conocemos.
También son un ejemplo muy claro los restaurantes de comida rápida, que acabaron por convertirse en empresas que cotizan en bolsa, como McDonals, el KFC, Burger King y muchos más.

Creo que el pequeño comercio tiene mucho futuro. Es un sector que esta ávido de nuevas ideas, de protagonismo, trabajo tenaz y mucho entusiasmo.
Maria Cáceres

1 comentario:

Teresa dijo...

María:

Haces una serie de afirmaciones más o menos acertadas o que aportan información histórica pero; a tus oraciones les falta relación entre ellas y cohesión; es decir,tienen que estar conectadas entre ellas de manera que expresen bien claramente tu opinión.