28 octubre 2011

Machismo


El machismo es un tema del cual se ha hablado mucho y se habla. Antes de nada podríamos definir el machismo como las actitudes y comportamientos que rebajan la dignidad de la mujer. El machismo en realidad es un tema que ya viene de hace mucho tiempo ya. En el pasado a la mujer se la dejo ya sin posibilidades de imponerse o hacer cualquier cosa y tratada como un objeto, además de impedir que tuviera algo de cultura. Ahora bien diremos que actualmente el machismo prácticamente ha desaparecido, ¡mentira! La mujer suele cobrar menos que el hombre en el trabajo, la actitud de muchos hombres es como si fuesen simples objetos muchas veces… Estas actitudes hacen como si la mujer fuera un ser inferior cuando realmente somos iguales. Diciendo iguales me refiero a que ninguno de los dos es más o menos que el otro, aunque cierto es que somos diferentes. El feminismo tampoco es un buen comportamiento ya que a quien se rebaja es al hombre. También es cierto que el feminismo existe más como una contra reacción al machismo. El machismo muchas veces ha ido con la religión, por ejemplo, en el cristianismo la mujer es considerada un ser con tendencias hacia el mal, incluso en algunos casos como el demonio mismo, y la mujer se trataba como algo impuro. En el caso del islamismo existe la poligamia y el hombre puede tener varias mujeres pero, no solo eso, sino que también nunca puede llevar la contraria al hombre y si traicionara a su marido con un solo hombre acabaría bastante mal. Mi opinión sobre esto es el machismo aun esta presente en la actualidad y existen muestras claras. No podemos negar que, sí, somos diferentes en varios aspectos, pero no por eso se debe menospreciar al sexo opuesto. Creo que como conclusión podría decir: 
“Nos tenemos que tratar como a iguales justamente por ser diferentes”

1 comentario:

Teresa dijo...

Miquel:
Me gusta mucho cómo has tratado el tema y lo ordenado que está pero debes trabajar más con la forma cómo lo dices (evitar repeticiones de palabras empleando sinónimos, mantener siempre un registro del lenguaje alto sin caer en palabras o expresiones coloquiales o propios de la lengua oral.)
También tienes errores gramaticales y sintácticos como "también nunca" cuando debes decir "tampoco nunca" o bien olvidas intercalar QUE en "Mi opinión sobre esto es el machismo ".