10 enero 2007

La genética

Desde tiempos inmemoriales el hombre siempre ha tenido la necesidad de superar sus propias capacidades, con el propósito de mejorar su calidad de vida. Con el avance de la ciencia el hombre se ha contestado preguntas que hasta hace unos años eran enigmas; nadie podía creer que era posible por medio de un proceso científico hacer a una persona idéntica en sus rasgos físicos a otra o que con unas células se pudiera crear un órgano para reemplazar al original que está funcionando mal; esto es lo que la ciencia ha denominado clonación y que ha sido uno de los avances médicos más importantes de los últimos años.
Todo esto ha llevado a la humanidad a un estado en el cual nos creemos dioses, creemos que podemos jugar con la genética, con la moral; creemos que el hombre es simplemente un ratón de laboratorio que sirve para experimentar en él, con el único fin de llegar al poder, conseguir un prestigio y enriquecerse económicamente. La pregunta que hay que hacer dentro de todo este contexto es ¿Dónde quedan los derechos humanos? Esta pregunta es muy difícil de contestar, pero podemos adelantarnos a la respuesta: tienden a desaparecer. Es muy triste aceptarlo pero la genética moderna así lo quiere. Por ejemplo, los que promulgan el congelamiento de embriones y óvulos para después ser objeto de estudio, de inseminación artificial e incluso de clonación, lo hacen a favor de la ciencia, pero ¿será sano y justo con la dignidad de aquel ser tenerlo en ese estado?
Ya para concluir, solamente añadir que considero que tanto la genética como la bioética y todo lo relacionado con los grandes avances –tanto científicos como tecnológicos- aún son temas para reflexionar i tomar conciencia de lo positivo y también de lo negativo. Creo que es necesario que tomemos conciencia de que el ser humano es sagrado y no tiene que ser manipulado exclusivamente con el fin de conseguir éxito o bien dinero. El fin de la genética debe ser desarrollar mecanismos e instrumentos que favorezcan a la humanidad para que esta, cada día sea mejor. Por otro lado, lo que debe buscar la genética es la extinción de enfermedades desfavorables para el hombre que por medio de los avances de la ciencia se han tratado de erradicar. Aún así, todo avance que se haga no puede pasar por alto los derechos humanos de las personas. Se tiene que tener en cuenta que los seres creados genéticamente tienen derechos al igual que todos nosotros, unos derechos que tienen que protegerse.

1 comentario:

Teresa dijo...

Rosa:
El texto está muy bien y no tiene demasiado que comentar. La estructura es correcta aunque encuentro a faltar en la estructura externa una división en párrafos que no haga demasiado farragosa la lectura.
El contenido está bien y también el léxico empleado es bueno.En el estilo hay algunos errores (i/y),errores de puntuación (esta,cada día sea/esta cada día sea)o redundancias que suenan mal (tiene que tener/debe tener)