30 marzo 2010

Poemas de la Generación del 27

Aquí tenéis los poemas de la Antología que deberíais leer. En total, hay 44 poemas (pero aquí sólo pongo los de la generación del 27) y algunos ya los hemos trabajado en lo que llevamos de curso. Aún quedan los más contemporáneos. Si alguien no encuentra su poema entre los de la Generación del 27 que me avise por correo y colgaré también los restantes de la antología.
Os incluyo también los poemas de Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez y Miguel Hernández aunque no pertenezcan a la generación del 27.
Incluyo este enlace a una página en la que encontraréis grabaciones en video de poemas de estos autores.
http://imaginame.wikispaces.com/

26 marzo 2010

GENERACIÓN 27

Enlace a "El baúl del mago"
http://sites.google.com/site/sitones/2%C2%BAbach


ROMANCE DE LA LUNA, LUNA


A Conchita García Lorca

La luna vino a la fragua
con su polisón de nardos.
El niño la mira, mira.
El niño la está mirando.

En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.

Huye luna, luna, luna.
Si vinieran los gitanos,
harían con tu corazón
collares y anillos blancos.

Niño, déjame que baile.
Cuando vengan los gitanos,
te encontrarán sobre el yunque
con los ojillos cerrados.

Huye luna, luna, luna,
que ya siento sus caballos.
Niño, déjame, no pises
mi blancor almidonado.

El jinete se acercaba
tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño,
tiene los ojos cerrados.

Por el olivar venían,
bronce y sueño, los gitanos.
Las cabezas levantadas
y los ojos entornados.

Cómo canta la zumaya,
¡ay, cómo canta en el árbol!
Por el cielo va la luna
con un niño de la mano.
Dentro de la fragua lloran,
dando gritos, los gitanos.
El aire la vela, vela.
El aire la está velando.







Enlace a "Hijo de la luna" de Meccano.

http://www.dilandau.com/descargar_musica/Hijo%20de%20la%20luna%20mecano-1.html

22 marzo 2010

Las películas Disney y su simbolismo

Disney es una empresa de animación y cine nacida el siglo pasado, la cual empezó dedicándose a la producción de cortos y películas de animación para niños. Después su éxito, sus ingresos fueron aumentando, y incrementó su mercado creando nuevos productos, abriéndose a nuevos campos como: realización de series de sus personajes más famosos, realización de series con actores de carne y hueso y comercialización de un sinfín de productos de todo tipo, básicamente con el logo de la empresa o con sus personajes de animación más emblemáticos.

Las películas de animación que esta compañía produjo se hicieron mundial-mente famosas y varias generaciones de niños (entre los cuales me incluyo) han crecido con las aventuras de sus personajes.

Ahora van y me dicen que en estas películas hay mensajes obscenos ocultos, personajes que influyen negativamente en el subconsciente de los niños y que estos filmes crean frustración y traumas a los niños que lo ven.

Yo, sinceramente, esto no lo veo así. ¿Que quizás todo está muy idealizado? Es probable, pero esto es lo que quieren ver los niños, historias con personajes guapos, con grandes cualidades y muy valientes (y que generalmente sean también divertidos). Yo creo que en estas películas no hay ningún tipo de mensaje oculto ni segunda intención en estas películas, sino gente que los buscan. Que quizás estos están hechos desde un punto de vista muy similar, usando como patrón los cuentos de princesas, pero no sólo están estos, también podemos tener como ejemplos otras películas como “El rey león” o “El libro de la selva” en los cuales se hace referencia a la fauna y natura.

Muchos dicen que los malvados de estas películas son extremadamente crueles, como Cruela De Vil que quería despellejar a los 101 cachorros de dálmata para hacerse un abrigo, o esas imágenes del Rey león de extrema crueldad. Según muchos esto no es bueno para los pequeños. Yo opino que sólo se hace para que los niños vean que malvado que es el enemigo, así cuando éste es vencido crea aun más emoción al final feliz, con el que acaban todos los cuentos de Disney.

En conclusión, que estas películas no creo que tenga un doble sentido más allá del que la compañía busca transmitir a los pequeños, ya que Disney sólo hace que entretenimiento y diversión para los niños.

SIMBOLISMO ESCONDIDO EN LAS PELÍCULAS DISNEY. _\,,/

Como en cualquier película, aunque esta sea inofensiva, de dibujos o incluso de documental, es fácil encontrar algunos aspectos racistas o machistas. Es posible que en la mayoría de casos no sea algo hecho expresamente, pero si intentas analizarlo, por ejemplo en las películas disney, se pueden encontrar grandes cosas para comentar.

Fijémonos en la película de “La Bella Durmiente”. Una bella criatura que viene al mundo, es hechizada por una bruja. Ella representa el diablo, que muchas veces está reflejado por una mujer. Podríamos llamarla la “zorra” de la historia. Pero no hay cuento en el que aparezca la mala o malo pero no el bueno, así que una vez Aurora ha crecido lo suficiente para que el deseo de Maléfica se haga realidad, encuentra un hombre y se enamora de ese precioso caballero que está presente en todas las historias de princesas que se hallan en problemas. Después de pasar por una serie de problemas donde ella también es ayudada por tres hadas mágicas, consiguen salvar a Aurora de su fatal destino gracias a una dura pelea en la que luchan el caballero contra Maléfica, esta vez transformada en un enorme dragón que parece ser inmortal.

Cuando por fin la malvada es derrotada, la princesa consigue vivir un futuro con el hombre de su vida donde “y vivieron felices y comieron perdices”. Es así como acaban la mayoría de películas infantiles.

Podemos decir, por ejemplo, que cuando empezamos a leer un cuento y vemos que aparece una princesa en apuros, podemos adivinar que aunque sufrirá en algunos instantes, acabará siendo feliz con su pareja. Tenemos entonces, la protagonista débil que es salvada por el super hombre que toda mujer desea, aparecen también los malos, ya sean hombres o mujeres, que lo pondrán todo relativamente complicado aunque salgan perdedores.

Si esto es una historia irreal, ¿Por qué no alejarse de lo real e intentar vivir unos momentos inesperados por los espectadores? ¿Por qué no intentamos dejar las pautas marcadas e inventar algo diferente y que consiga hacernos sentir unos niños otra vez?

20 marzo 2010

EL SIMBOLISMO DE LAS PELÍCULAS DISNEY

Millones de niños, de generaciones distintas y distantes , han crecido viendo las películas de la compañía Disney. Estos largometrajes nos han enseñado a todos unos valores ejemplares que debemos llevar a cabo en la vida real como el amor, luchar por el bien de la sociedad y en muchos casos, valorar el interior del sujeto amoroso.
Estas películas nos han enseñado muchas doctrinas morales en su simbolismo pero en el mismo también podemos apreciar un simbolismo oculto que es oscuro y perjudicial para los niños.
Analizando los elementos más visibles del simbolismo Disney, podemos apreciar una temática basada en el racismo, como en el caso del rey león, el villano es de pigmentación oscura, y en el caso de Tarzán que es un hombre blanco que reina en la selva (hecho que sería más probable bajo mi punto de vista en una persona autóctona.
En muchas películas podemos observar que los personajes principales buenos destacan por su físico esbelto, con pocas taras identificables directamente etc.
Evidentemente, parte del simbolismo de estos films es debido a la forma que se le quiere dar a la película, es decir, que una persona prefiere ver un héroe guapo y una princesa muy bella.
Cabe destacar también que las películas Disney no preparan a los niños para la sociedad, pero no es su función, su finalidad es divertir a los niños para que evadan temporalmente de la dura sociedad, ya existen otros métodos para concienciar al público más joven.
Bajo mi punto de vista, el público que aprecia cualquier arte añade nuevos significados ya que cada individuo percibe el arte de diversas formas.
La crítica hacia este simbolismo es muy relativa, entonces yo creo que debemos ser muy analíticos pero no debemos acusar a una entidad, que sólo quiere divertir al público mayoritariamente infantil, por expresar temas ofensivos a ciertos grupos sociales ya que des de mi punto de vista Disney exclusivamente quiere crecer y seguir produciendo películas para el público infantil.
En conclusión, las películas Disney tienen un simbolismo muy importante y que no se debe juzgar de forma cerrada ya que nadie sabe las razones de porque se hicieron estas acciones cinematográficas llenas de matices distintos que se pueden interpretar de buena forma o se pueden mal interpretar.

18 marzo 2010

SIMBOLISMO EN LAS PELÍCULAS DISNEY

Hace unos meses, toda la clase se vio en medio de propuestas y votaciones de las redacciones del segundo trimestre. No sé porque, me paso por la cabeza la idea de proponer este tema, quizás por la originalidad o simplemente por decir algo. Yo también pertenezco a la generación de los noventa, he escuchado y bailado Britney Spears antes de que empezara a beber y drogarse y los teléfonos móviles eran grandes, con antena y solo se podía llamar o enviar mensajes de texto. Y sobre todo, mis padres me compraron los cuentos, casetes i libros de todas las historias Disney. De hecho pasaba horas y horas emocionada pegada a la tele repitiendo una vez tras otra las mismas películas, por desgracia de mis padres (ahora me ha tocado a mi tener que aguantarlo con mi hermano).
Bambi, Pocahontas, el Rey León, el Libro de la Selva, el Jorobado de Notre-Dame, la Sirenita, Blancanieves, etc. Todas y muchas más, son obras del conocido y misterioso Walt Disney, un productor, director, guionista y animador estadounidense que junto su hermano crearon una compañía mastodóntica que aún sigue presente en nuestras vidas y las futuras generaciones.
Estas historias representan una forma de vivir ni más ni menos idealizada, que inculca a las niñas la importancia de ser bella, inocente, buena y esperar felizmente a que llegue el fuerte, valiente y hermoso príncipe. ¿Es negativo? ¿Es malo hacer creer a los niños que a veces las historias terminan bien? Pienso que a los niños, que aún no tienen uso de la razón y están en una constante descubierta del entorno, no les hace ningún daño irreversible. La vida no es como la plantean, la gente muere, sufre, llora, existen esas brujas y villanos que aparecen en los cuentos no solo en nuestro alrededor, sino que también dentro de cada uno. Pero Disney quería que los niños y niñas pudieran soñar, pensar que un día las cosas serian más bonitas, ya que en esa época en el primer mundo aún había guerras, miseria, hambre y enfermedades. Este era el principal objetivo de Disney: inculcar valores positivos para esos niños y darles esperanzas para el futuro.
No creo que haya demasiado simbolismo, quizás Disney quiso figurar sus aspiraciones, sus ideologías y filosofía, de nunca darse por vencido, esperar a que salga el sol, luchar contra las injusticias y intentar amar y ser amado. Esta es la simbología que encontraremos (luego, lo que vean otros, algunos enfermos y obsesionados en el tema, es otra cosa).
Sí, es una idea muy conservadora, el American Dream, solo falta que al final de la Blancanieves, ella y el príncipe fueran a comprar la cuna y a contractar una hipoteca. Esto es criticable ahora, porque el mundo evoluciona constantemente y ahora es legal casarse con alguien del mismo sexo, las mujeres tienen hijos artificialmente, en los videoclips las cantantes enseñan más pecho que cara, los preadolescentes de doce años se encuentran con nuevas palabras como el botellón y las drogas. Las cosas cambian.
Pero miro a mi hermano y pienso: ¿Le cuento que más de la mitad de la población mundial sufre mal nutrición? ¿Que en el mundo hay más de 33 guerras aún sin solucionar? ¿Es necesario darle esta grande dosis de realidad? Al fin y al cabo, cuando vaya creciendo se irá dando cuenta que el Universo es grande y que contempla muchísimas posibilidades y finales de las historias.
No negaré que quizás tenga el deseo que mi vida termine como Pocahontas o algún otro cuento, pero prefiero tener esta esperanza romántica e irreal que no tener que ser consciente que nunca podremos ser realmente felices. Este es mi punto de vista, respeto los de los otros también. A mi estas películas me hicieron reír, llorar, soñar, me entretuvieron. Y estoy orgullosa de esto, quizás por esto sea más bien una persona soñadora y que frecuentemente idealiza las cosas, pero no me arrepiento y si un día tengo hijos (míos o adoptados) me tumbare al sofá con ellos con palomitas para disfrutar de alguna historia de esas.
El simbolismo oculto en las películas Disney.

¿Y quién no ha visto películas Disney? A partir de los años 1930 (1937 para ser exactos) la compañía Disney empezó a lanzar al mercado sus largometrajes. Una de sus clásicos, Pinocho, data del año 1940, seguida por Dumbo y Bambi de 1941.
Ya son tres generaciones las que han crecido acompañadas de los clásicos de Disney, y millones de niños en todo el mundo.
En la actualidad se habla de el poder destructivo que pueden tener los video juegos agresivos en la educación de los niños; pero y las películas Disney?
Creo que si los niños crecen aprendiendo de las películas Disney también deberíamos analizar los valores que estas películas pueden transmitir.
Por una parte, creo que estas películas han transmitido valores idílicos de los humanos a muchos niños. Tarzán cuenta la historia de un niño diferente a su entorno que logra integrarse y destacar gracias a la oportunidad que recibe. La bella y la bestia nos enseña a no juzgar a los demás por su apariencia y nos incita a buscar en el interior de las personas, de la misma forma que se puede apreciar en Dumbo o el Jorobado de Notre Damme. De la misma forma en que Todd y Tobbi nos transmitió la idea i el valor de una profunda amistad poderosa. La fuerza del amor vino dada por Pocahontas y el Bravo John...
Además de algunos valores, las películas Disney también han expresado deseos o inquietudes interiores: la inquietud i curiosidad por lo desconocido se puede apreciar en la sirenita, quien anel·la conocer y percibir el mundo terrestre.
Hasta aquí podríamos decir que estás películas sólo nos proporcionan buenas enseñanzas, pero en mi opinión, detrás de todo esto también podríamos encontrar otros mensajes tal vez más ocultos:
Las películas Disney tienen su base en un clásico argumento: Presentación, nudo o problema y desenlace. La parte curiosa es que el desenlace de la película siempre es bueno: El rey león llegó a ser rey, Aladín se casó con la princesa, blancanieves despertó y la trágica historia de Bambi también terminó bien. Creo que esta forma de terminar los cuentos produce una idea distorsionada de la vida; las cosas no siempre suelen acabar bien en la vida real. Si los niños crecer con el pensamiento que las cosas se van a solucionar por sí solas puede que se lleven más de una decepción en la vida, además si tenemos una mamá que nos lleva entre algodones luego el golpe es fuerte.
Otro tema que me gustaría criticar es el carácter de los personajes, en especial las cualidades y las relaciones amorosas.
Resulta casual, que todos los protagonistas de las películas Disney son perfectos en su carácter, són el reflejo de la bondad, son idílicos en su psicología personal. Creo que las personas tenemos, cada una de nosotras, muchas virtudes (quien más quien menos) y muchos defectos, y este aspecto forma parte de la realidad psicológica humana; y me gustaría que estuviera reflejado en las historietas.
En las relaciones amorosas, sale a la luz una visión ultra conservadora de las relaciones de pareja.
Las chicas, siempre son guapas, inteligentes, divertidas.. de el mismo modo en que el chico también es alto, guapo, fuerte.. Estas películas, enseñan a valorar el físico en especial de igual manera en que nos intentan no fijarnos en el más que en la psicología.
Por supuesto, los personajes, cuales criaturas divinas, al verse se enamoran y después de algún tipo de problema en medio, se sella el amor eterno entre ellos. Más tarde, tendrán hijos y vivirán en una casa con tres pisos y jardín. Cosa que recuerda más el sueño americano que otra cosa.
Por lo tanto creo que estas son conductas y formas de actuar, que por lo tanto se convierten en ideas inculcadas, un poco “pasadas de moda” o propias de una sociedad muy conservadora.
También es verdad que existe la nueva generación Disney, en la que ha triunfado Hanah Montana o Cars, pero que no quiero comentar porque los valores me parecen sumamente superficiales y materialistas.
En conclusión, creo que las películas Disney esconden detrás una extensa ideología y formas de conducta que se implantas a los más pequeños a la vez que disfrutan y aprenden con las moralejas de cada historia.
Aunque me costaría de creer, creo que los valores de éstas películas deberían modernizarse un poco, como por ejemplo podrían crear un tipo de Bella durmiente con un matrimonio gay o bien una Sirenita que termina abandonada el día de la boda y decide ser madre soltera. Creo que este tipo de situaciones enseñarían mucho más a los niños y se correspondería más con la realidad.

SIMBOLISMOS DISNEY


¿Quién no ha visto, alguna vez, las entrañables aventuras del Libro de la Selva? ¿O La Blancanieves y los siete enanitos? ¿El Rey León? ¿La apasionada historia de Bambi?
Todas estas películas han sido creadas por Walter Elias Disney, aunque ya existían previamente como cuentos para niños. Y justo en éste argumento me voy a basar para justificar mi postura.

Primero de todo, me gustaría dejar claro mi punto de vista por lo que hace referencia a los simbolismos intolerantes (teniendo en cuenta que se tratan de películas dirigidas a pequeños) que se atribuyen a varias películas producidas por Disney.
Muchas personas (normalmente cibernautas aficionados) afirman la existencia de símbolos ocultos relacionados mayoritariamente con la sexualidad.
Por poner algún ejemplo, creen que en la inocente película de La Sirenita aparecen secuencias, imposibles de captar por el conciente humano pero si por el inconsciente, dónde se hacen visibles dibujos relacionados con el sexo: un pene erecto en la portada de la película perdido entre las columnas del castillo.

Sin duda, considero esto fuera de lugar. Creo que éste tipo de cosas solo se encuentran si uno verdaderamente desea encontrar-lo. Por lo tanto, quizás deberíamos preguntarnos antes si no seremos nosotros los descarados y, en cierto punto morbosos, que tratamos siempre de buscarle los tres pies al gato (que sin duda no los tiene) y los que intentamos atribuir el hecho al cada vez más rudo comportamiento de nuestras futuras generaciones.

Las películas Disney nos han acompañado desde bien pequeñitos y han fomentado nuestro crecimiento sobre una base llena de valores sociales.
Bambi nos demuestra la peligrosidad de los fuegos; La Blancanieves la actitud que no se debe tener delante de algo ofrecido por un desconocido; La Bella y la Bestia el no juzgar a nadie por su físico y, a la vez, nos invita a conocer la gente en profundidad; y así sucesivamente.

Creo que he dejado clara mi postura delante de éste tema: me considero una privilegiada por haber podido crecer y aprender de una forma tan dinámica como la que nos ofrecen éste tipo de películas los valores fundamentales de la sociedad, y a la vez, me abstengo a pensar en cualquier tipo de simbolismo oculto, pues considero que las películas Disney son inocentes completamente. De no ser así, ¿qué finalidad podía perseguir el señor Elias introduciendo mensajes subliminales sexuales dentro de sus fantásticas películas?
Lídia Puyals

15 marzo 2010

El capitalismo

Todos sabemos que el capitalismo es el sistema económico actual. Igualmente sabemos que funciona con la oferta y la demanda de productos, o séase, con el mercado.
Este sistema, lejos de lo que sería un sistema económico perfecto, está plagado de defectos que afectan más que nada al pueblo.
Uno de estos inconvenientes es el consumismo. Este sistema incita a todo el mundo a consumir, cuantos más objetos - y mejores - tengas serás más afortunado y, en general, más feliz. Se preocupan más por la cartera y cómo llenarla aún más, no cómo ser más feliz con tu pareja, en hacer feliz a los demás... La sociedad se ha vuelto excesivamente materialista. En general provoca egoísmo y avaricia. Para postre, el dinero está extremadamente mal repartido, sólo hace falta comparar al conocido Bill Gates, con más de 40 mil millones en su haber, junto con muchos otros multimillonarios, con alguien del tercer mundo, que si tiene dinero para comer ya es mucho.
Otro gran problema es la sobreexplotación, no sólo de recursos sino también de mano de obra. Los recursos cada vez son extraídos más velozmente, sin dejar tiempo al planeta para regenerarse. En el caso de la explotación de mano de obra, se pagan precios irrisorios a la mano de obra, sobre todo en los países del tercer mundo, pero también en el este de Europa. Además, las condiciones son desastrosas y el trabajo infantil está presente en muchos de ellos.
Un tercer problema es la periodicidad de crisis económicas. Cada cierto periodo hay una crisis de carácter mundial. Primero fue el crack de 1929, luego la crisis del petróleo y la actual. Mientras no se cambie el sistema cada cierto tiempo habrá una crisis, sea por la causa que sea.
Otros problemas son el desempleo, el excesivo ánimo de lucro, etc.
En definitiva, el capitalismo es un sistema con demasiados problemas, pero vamos a tener que conformarnos con él hasta que a alguien se le encienda la bombilla y invente un nuevo sistema más igualitario y en general que estimule a evitar l consumismo excesivo.

10 marzo 2010

LA INFLUENCIA DEL CAPITALISMO A NUESTRA PERSONALIDAD

El capitalismo es un sistema económico en el que los seres humanos y las empresas llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante transacciones en las que intervienen los precios y los mercados.

En la historia del ser humano ha habido diferentes sistemas económicos o más bien sociales, desde las organizaciones colectivas y sociales de los primeros homínidos hasta las monarquías absolutistas que dominaron Europa y Asia durante la Edad Media. El capitalismo tiene sus orígenes junto al comercio de bienes que había en la Mediterránea dominada por griegos y romanos, más tarde árabes. La aparición de una moneda para representar un valor del intercambio también fue entonces. Pero el capitalismo actual vino juntamente con la destrucción de la monarquía o poder absoluto como empresa de el país y que durante la revolución industrial pequeños comercios se convirtieran en grandes peces. Es entonces cuando realmente existe la preocupación por el intercambio y una producción sin tener ningún control. Estas empresas han ido creciendo y creciendo hasta poder controlar la mayor parte de la economía mundial, multinacionales como Nestlé o General Motors.

En este breve resumen de la evolución de la economía y los orígenes del capitalismo nos ayudara a entender nuestro comportamiento ante este. ¿Cómo nos influye un sistema económico en nuestra personalidad? Aparentemente no tiene ningún tipo de relación. Pensaremos:” ¿Qué tiene a ver el dinero de mi bolsillo con mi carácter?”.

Creemos que somos seres libres porque vivimos al siglo veintiuno y la mayoría de países del planeta tienen una aparente democracia al gobierno. Pues bien, si antes nuestras ataduras eran más visibles y gruesas (falta de derechos y libertades, opresión si no formabas parte de la élite) ahora son invisibles pero igualmente gruesas. Dependemos de que dice la sociedad, de los medios de comunicación, de su publicidad planeada por las multinacionales y arriba de todo el pastel, la cereza; del capitalismo. Las clases sociales no se han destruido, permanecen, y según tu nivel económico podrás tener unas aspiraciones o no. Esta es una importante influencia del sistema económico claramente. Pero incluso la gran preocupación de recibir un sueldo a fin de mes i conseguir un buen trabajo para llevar adelante un futuro que consiste en hipoteca y dos hijos, es consecuencia de este sistema. El hecho de la manipulación que recibimos por los mass media, cada año el cuento es diferente - que si cambio climático, gripe aviar, la crisis económica, etc.- influye en nuestros temores y necesidades. Y siempre ganan los mismos, las grandes y enormes empresas, el capitalismo.

Vemos que somos los peones de un juego de ajedrez, que de hecho, es similar a las pasadas monarquías que tanto luchamos para destronar, aunque con diferente figura del “rey”. Hacen que necesitemos mediante constantes estímulos publicitarios sus productos, controlan nuestras vidas (que fumamos, que pantalones vestimos, que yogur debe tomar el hermano pequeño y cual la madre, que coche toca a nuestra clase social, etc). Pueden influenciar sobre nuestra personalidad volviéndonos en seres consumistas, despreocupados y dependientes de la sociedad en general.

Aún así, y con mezcla de infinita tristeza y alivio, estamos en el equipo que gana el partido, ya que el capitalismo de hoy en día oculta en el tercer mundo su cara más devoradora y cruel, como si fuera una dictadura de las empresas y los “carters”. Es allí donde la gente debe trabajar por ellos hundiéndose cada vez más a la pobreza, explotación de sus recursos y muerte de sus culturas, en definitiva, es la más grande prostitución de centenares de naciones bajo el capitalismo.

En conclusión, nuestras vidas (también nuestra personalidad) son como marionetas, pensamos ingenuamente que somos libres cuando aun existe la esclavitud, pero sin cadenas de hierro y látigos (al menos en mi país). Más que influenciados, estamos manipulados por el capitalismo.

09 marzo 2010

La influéncia del capitalismo

El capitalismo es el sistema económico que impera actualmente y está basado en la ley de la oferta y la demanda y, por lo tanto, en el mercado.

El capitalismo tiene unas ciertas consecuencias, como por ejemplo la aparición de clases sociales, la multiplicación de las marcas, el desnivel económico entre personas, las crisis periódicas y el consumismo.

Estas consecuencias causan un efecto en el individuo, haciéndole actuar o ser de un modo parecido. Por ejemplo, alguien de la clase social alta tiende a actuar de un modo más, llamémosle, sofisticado, ya que éstos crecen inmersos en un ambiente de comodidades y de lujos, un largo etcétera de cosas innecesarias que ellos consideran que los hacen más felices. Estos individuos crecen de una forma concreta y acaban con grandes tendencias hacia practicar el consumismo, no viéndose nunca satisfechos y creando siempre un sentimiento de vacío. Este tipo de gente desarrolla frecuentemente una mayor frustración y se deprime por minucias que pasan por alto a una persona de clase social inferior sumergida en su vivir cotidiano por la mera supervivencia. También puede ocasionar un mayor nivel de corrupción y actuaciones sociales con peores intenciones, ya que para nada quieren perder la situación de la que gozan. Otro ejemplo es que la gente de clase social inferior, desarrolla una actitud más pandillera y despreocupada, a veces violenta y delictiva. Estos se preocupan menos de los estudios de lo que puede hacer alguien de clase media o alta, ya que a estos últimos se les conciencia de que tienen que estudiar para mejorar. Con esto no quiero estar creando estereotipos ni nada parecido, sólo comento como acostumbra a ser la actitud de éstos ya que siempre hay excepciones en todo.

El consumismo, como he dicho, es otra de las consecuencias del capitalismo y éste es un sentimiento que aparece en la gente y consiste en intentar obtener todo tipo de productos para intentar satisfacer esta ansia y obtener unos bienes, que casi siempre son innecesarios. Esto nos hace tener todo tipo de cosas y así nos hace a todos más originales, pero supone un derroche de dinero desmesurado. Por ejemplo, he oído de gente que simplemente se compra una cosa porque los otros lo tenían o para presumir de una prenda de ropa que jamás se va a poner.

Esto yo creo que no es bueno para el individuo, ya que, aparte de un gasto inútil de dinero y una acumulación innecesaria de productos, puede llevar a una frustración si los otros tienen más, entrar en una cadena imparable y la sensación de sentirse siempre inferior a los otros.

Sin ningún tipo de duda, el capitalismo y el consumismo afectan claramente a la manera de ser y de actuar del individuo. Y esto no siempre es positivo.

La cigarra y la hormiga

Todos alguna vez hemos oído hablar de la fábula de la cigarra y la hormiga.
En mi caso he escuchado dos versiones:

Cuando era pequeño mi madre me contó esta fábula donde aparecen una hormiga y una cigarra. La hormiga pasa un terrible verano en que se dedica a recoger alimentos y construir una casa pensando en la llegada del invierno. Mientras tanto la cigarra disfrutaba de la agradable temperatura estival cantando y cantando sin pensar en su futuro.
La cigarra con la llegada del invierno se encuentra sin alimento ni refugio y pide ayuda a su vecina la hormiga, esta le da granos de arroz y le aconseja que no pierda el tiempo durante el próximo verano.

Al cabo de dos años una tía mía me contó esta misma fábula pero con final diferente, este final me decepciono bastante.
En esta fábula con la llegada del invierno, la cigarra se encuentra sin provisiones ni refugio y decide acudir a su vecina la hormiga, la cigarra le pide ayuda pero la hormiga le responde que tendría que haber trabajado durante el verano y ahora se espabilase.

En esta fábula entendemos una moraleja, si no trabajas cuando lo tienes que hacer luego te arrepentirás y lo pasarás mal. Pero en mi opinión en la primera que me contaron encontramos una segunda moraleja, todo el mundo merece una segunda oportunidad. Por ese motivo encuentro más apropiada la primera fábula donde puedes sacar una doble moraleja y aprender más que en la segunda donde la cigarra no recibe ningún tipo de ayuda y queda muy afectada.







Roger Sánchez

La influencia del capitalismo en la sociedad

El capitalismo es un sistema económico en el que los seres humanos y las empresas se encargan de la producción y del intercambio de bienes y servicios.

En mi opinión este sistema hace que las personas nos volvamos egoistas y adoptemos formas de comportamiento poco humanas.

Este sistema está muy relacionado con el consumismo, en el que importa más tener que ser. La gente comete un gran error y piensa que por tener más seran más felices, entonces esto nos lleva a valorar a la gente por lo que tiene y no por su forma de ser.
Nos hemos convertido en una sociedad que acude muy frecuente a las tiendas para comprar productos la mayoría de veces innecesarios.
La sociedad actual se ha acostumbrado a abandonar objetos utilizables para canviarlos por productos novedosos.
Esto es un grave problema, ya que nos cansamos muy pronto de lo que compramos y vamos corriendo a substituirlo por otro.

Por suerte o por desgracia este sistema va acompañado de períodos de crisis económicas, que provocan degradaciones bruscas y repentinas de la actividad y perspectivas económicas, afectan gravemente a la población ya que mucha gente pierde sus sitios de trabajo.
Este sistema ya ha sufrido varias crisis pero parece ser que el ser humano no se de cuenta de estas situaciones ya que siempre caemos dos veces en la misma piedra y no hacemos nada para remediarlo.

En conclusión creo que la sociedad tendría que ser más inteligente y no dejarse influenciar de manera tan descarada por los que nos dominan, personalmente opino que todo nos iría mejor y seríamos más felices.






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Roger Sánchez

05 marzo 2010

Influencia del capitalismo en la personalidad del individuo

El capitalismo tiene una serie de consecuencias que se ven marcadamente reflejadas en la vida de las sociedades y por lo tanto en la personalidad del individuo en si.

El hecho de depender económicamente de empresas que llevan a cabo la producción y que regulan la economía del país genera una serie de comportamientos en las personas nada deseables.

Uno de ellos podría ser la mentalidad materialista y competitiva, en otros términos, el consumismo. El consumismo es un comportamiento típico de las sociedades de países desarrollados y en el que se valora más el tener que el ser. Los individuos caen en el grave error de asociar la felicidad con lo material, cosa que deriva a una conducta extremadamente consumista en la que las personas se valoran unas a otras por los bienes que tienen en lugar de por su personalidad. Salir a comprar sin necesidad alguna, comprar cosas poco útiles y lanzar objetos perfectamente utilizables y substituirlos por alguna novedad que haya salido recientemente en el mercado. ¿El problema? Consiguen la felicidad, pero esta pronto se desvanece. ¿Solución? Ir de compras.

Podría analizar otros comportamientos típicos de la sociedad capitalista (explotación de la mano de obra, concentración del poder económico en pocas manos, crisis económicas que generan terror cada cierto tiempo, desempleo…) pero con todos llegamos a la misma conclusión: el capitalismo influye al individuo de tal manera que convierte a todas las personas de una sociedad en títeres que actúan todos de la misma forma, con unos objetivos muy similares y sin un espíritu libre debido al intenso control que realizan aquellos que están por encima de nosotros i que controlan nuestro día a día.
Lídia Puyals

LA CIGARRA Y LA HORMIGA(repetición)

Todos alguna vez hemos oído, leído y divertido con la historia de la cigarra y la hormiga.
Esta historia es un reflejo de nuestra sociedad ya que estos problemas son muy freqüentes en muchos lugares y personas.
Como bien sabemos, desde el inicio de la civilización el hombre ha apreciado más a la parte práctica del cerebro que es la izquierda. Esta parte es muy importante ya que es la que se relaciona con el desempeño de funciones prácticas en la sociedad.
Si hacemos un repaso de la edad, podemos afirmar que las personas que tenían un cerebro imaginativo y poco práctico eran considerados como carga en la sociedad y posteriormente en la edad moderna, esos grupos acabaron estando inmersos en la bohemia.
Si analizamos la linea comparativa entre literatura y realidad podemos observar que es lo mismo plasmado al papel y al dibujo.
Bajo mi punto de vista las personas que son poco prácticas, deben ser acogidas por sociedades rectas y monótonas con la intención de divertir a la gente y aportar unas características muy importantes de la vida como la diversión, la música, los relatos y la simpatía.
Esta opinión también debe ser interpretada como la exposición de un valor de ciertas personas que debe ser recompensado con un salario y otras opciones de calidad de vida. No solamente los deportes de masas, los videojuegos y los libros son herramientas de diversión sino que también la originalidad, la intención de romper con lo escrito y el hecho de vivir la vida haciendo actividades no tangibles, deben ser valoradas como un trabajo en la sociedad.
En conclusión, todas las personas tienen habilidades y que por raras que sean, tienen el derecho a llevarlas a la práctica.

LA INFLUENCIA DEL CAPITALISMO EN LA PERSONALIDAD DEL INDIVIDUO

El capitalismo es un sistema político y económico donde el estatus social viene determinado por el trabajo del individuo, su inteligencia, su físico, su salud y fundamentalmente su suerte en la vida.
Bajo mi punto de vista existen dos claras influencias sobre la personalidad de los individuos mayoritariamente de clase media,estas dos influencias son: el materialismo que se introduce en las mentes de las personas que tienen una economía positiva, y el egoísmo entorno a conseguir mejorar nuestra condición sin valorar el daño que podemos llegar a causar.
Valorando estas tesis podemos mencionar que el individuo occidental vive para mejorar su condición y la de su familia, y que al mismo tiempo que mejora se puede olvidar de los valores humanos. Este oblido tan importante va relacionado con el materialismo, es decir, que una persona da más importancia a su nivel económico y de posesión de bienes que no a ayudar a personas que necesitan ayuda severa.
Como todos sabemos en el capitalismo existen crisis económicas periódicas que cuestan de eliminar. Entonces el individuo de clase media que desciende a una división obrera obtiene pensamientos racistas y culpa a personas de otros lugares que para él son personas inferiores.
En el capitalismo, la gente desempeña un trato con la otra gente según como le va la vida, es dec ir, que si tienen cualquier tipo de problema se vuelven humanos de repente pero si están inmersos en una atmósfera de prosperidad económica, los demás no son nadie.
Volviendo a la segunda tesis, podemos afirmar que si una persona depende de una nota o de un título, no ayudará nunca a una persona que le pueda quitar su puesto o su prestigio.
En conclusión, las personas estaremos siempre influenciados por un sistema que nos obliga a ser egoístas y mirar por nuestra vida y abandonar la de los demás. Y que si no socializamos un poco la educación mejorándola y igualándola para que sea para todos los ciudadanos igual, y posteriormente las empresas y la relación de entidades o individuos, estaremos inmersos en un mundo sin llevar a cabo nuestra actuación de nuestra auténtica naturaleza humana.

04 marzo 2010

La Influencia del capitalismo en la personalidad del individuo:

El capitalismo es un sistema económico organizado principalmente en empresas que llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante transacciones en las que intervienen los precios y los mercados,
Primer de todo, me gustaría decir que tenemos que tener presente que es difícil analizar las influencias que tiene el capitalismo sobre nuestras personalidades ya que no conocemos de primera mano una sociedad o una forma de ser distinta.
Creo que la característica que resalta más es el materialismo que nos inculca, es decir valoramos más los gestos materiales que los sociales o humanos. No creo que esta afirmación sea una hipótesis, ya que una persona prefiera un regalo material (a poder ser caro) a una manualidad, es un echo.

Ya desde pequeños nos enseñan que debemos estudiar a poder ser, para conseguir un buen trabajo en que se gane mucho dinero, luego comprar una casa, obtener terrenos y poder satisfacer todas nuestras necesidades y a poder ser caprichos sin problemas.
Hoy en día, un alto porcentaje de los adolescentes prefieren ropa de marca, móviles caros a aquellos objetos más simples que podrían satisfacer sus necesidades sin aportar excesos: Éste es un claro ejemplo del capitalismo que crece desde nuestras raíces.
El capitalismo nos a inculcado también, según mi opinión, una visión muy superficial de nosotros mismos: a menudo nos fijamos más en las apariencias y posesiones de las personas que no en su interior. Un chico con un buen coche y un chalet, nos da más buena impresión y por tanto valoramos más que alguien quien a penas puede pagar la hipoteca.
Además, la mítica frase de: el dinero no consigue la felicidad, parece que a medida en que pasan los años cada vez tiene menos valor. Estoy segura que muchos de nosotros nos ponemos felices y contentos cuando vamos de compras y adquirimos ropa nueva para estar a la última moda. Y ya no hablo de poderse comprar el mejor ordenador portátil del mercado, o un coche de edición limitada que sólo tienen cinco personas en el mundo.
Poco a poco, nuestra felicidad depende cada vez más de el dinero: poder pagarse unas buenas vacaciones, miles de caprichos como ya hemos hablado.. etc.
Ya nadie se escapa de las influencias de el capitalismo, o al menos éso parece.
Aunque no lo parezca, el capitalismo se puede extrapolar hacia muchos ámbitos humanos, no sólo nuestra manera de actuar en sociedad:
Por ejemplo, una consecuencia de éstos rasgos capitalistas también nos lleva a cambiar el curso de nuestra evolución humana y la selección natural. Antes, las personas miopes por ejemplo, estaban condenadas a excluirse de la sociedad, ya que sus recursos humanos no eran suficientes para la supervivencia.
Hoy en día, la supervivencia está únicamente condicionada por el capital que posee el individuo: la persona con capital podrá entrar en la sociedad, en cambio, un vagabundo de la calle está condenado a la exclusión social y la falta de recursos básicos.
Por tanto, el capitalismo nos crea falsos ideales y percepciones sobre las personas, además de el echo de no poder valorarnos a nosotros mismo por las ideas que podemos portar, sino para las propiedades que podremos llegar a poseer.
En conclusión, creo que éste tema abarca muchos registros humanos y puede ser estudiado desde distintos ámbitos, por lo tanto éste texto es insuficiente para poder profundizar en el tema.
Por lo que hace mi opinión respecto el capitalismo, creo que es un mal sistema, aunque la moneda o capital sea una invención humana, creo que más que una herramienta se ha convertido en un monstruo que no se permite dominar: ya no somos nosotros quien condicionamos el comportamiento de el capital y la humanidad, sino que el propio capital guía nuestras ambiciones y relaciones.
Además creo que anul·la por completo la capacidad de amar sin obtener nada a cambio, ya sea una persona, objeto, conocimiento.. etc. Por lo tanto destruye la vitalidad y creatividad de el ser humano. También cabe destacar que es un sistema del cual es difícil escaparse, y puede que éste nos persiga durante muchos años más.