07 octubre 2013

¿ES ÚTIL HACER REDACCIONES CADA 15 DÍAS?

En primer lugar, cabe decir que saber escribir y redactar es algo clave, necesario e imprescindible para la vida. Va a acompañarnos para siempre y es algo que utilizaremos muy seguidamente, ya sea para hacer instancias, cartas, currículums u otros textos, en definitiva nos servirá para comunicarnos con quién sea necesario.
Siempre se tomarán más en serio a alguien que redacta bien que a alguien que es desastroso o tiene faltas de ortografía, que son síntoma de dejadez e indiferencia, las redacciones quincenales no sólo son útiles para aprender a redactar y escribir sino también para mejorar nuestra ortografía. No escribir con faltas es muy necesario, y a medida que pasan los años, cada vez más, es imprescindible ir menguándolas y mejorar.
Entregar un texto con faltas de ortografía, en según qué sitio puede llegar a ser incluso de mala educación e irrespetuoso. Un texto puede decir muchas cosas sobre nuestra personalidad, puede indicar que eres una persona ordena y pulida, responsable, seria, etc… Si aprendemos a escribir correctamente, a la hora de hacer una carta de presentación para un empleo, por ejemplo, optaremos con más facilidad al puesto de trabajo, estaremos fácilmente por delante de alguien que no escriba bien.
Existen otros métodos para aprender a escribir bien, la lectura es uno de ellos. Al leer estamos constantemente viendo palabras, en consecuencia, si lo haces con frecuencia acabarán quedando guardadas en la cabeza, a base de verlas se memorizan inconscientemente. Leer tiene también otros efectos ventajosos, como es la coherencia, y nos otorga agilidad a la hora de estructurar y escribir un texto.
Las redacciones, en definitiva, acaban siéndonos útiles. Siendo corregidos y viendo nuestros errores se aprende más rápido y se mejora notablemente. Se debería poner empeño a la hora de hacerlas, ya que al fin y al cabo no te van a quitar mucho tiempo de tu vida y te ayudarán a mejorar si te las tomas en serio, explotas algunas de tus capacidades como es por ejemplo la imaginativa.

Algún día agradeceremos a nuestros profesores el habérnoslas mandado, aunque sean pesadas algunas veces. Las enseñanzas quedarán en nuestra persona haciendo de nosotros personas de provecho. 


ELSA MORALES

1 comentario:

Teresa dijo...

Bien redactada, Elsa. ¡¡¡¡Yo diría que ya se empiezan a recoger los frutos de toda una vida académica haciendo redacciones!!!!
Ahora hablando seriamente, está bien en general y, puestos a encontrar algo que mejorar, te repites un poco con la idea de las faltas de ortografía.